Corrupción, la maldita mancha de aceite.



Si todos son corruptos ¿a quién voto?



Da miedo pensar, la alternativa de voto en España, hoy por hoy, cuando, todos los partidos, salvo honrosas excepciones, están impregnados, de corrupción, a nivel nacional. El voto, por tanto, permanece, en una especie de limbo, esperando un dueño, que convenza.

Con un PP, cuyos casos de corrupción, salen a la luz, día si y día también, un PSOE, que huele a podrido, en Andalucía, la alternativa, que nos queda es, un partido, que ni fu ni fa y otro, tan populista, que nos llevaría, a la ruina económica, en pocos meses.

Cuando, después de una dictador, todos votamos una Constitución, en la que, dos comunidades, salían favorecidas, no fuimos capaces, de ver, lo que se nos veía encima. Estábamos eufóricos, con Franco fallecido, esperamos ansiosos, el devenir de los acontecimientos.

Hemos disfrutado, del periodo de paz, más largo de nuestra historia, tan solo manchado, por los asesinatos de ETA y todo el dolor, que ello nos produjo.

Los que ya pasamos, de los cincuenta, recordamos, que la responsabilidad, era buscarte, como se suele decir, la vida y aportar tu granito de arena, a la sociedad.

Sin embargo, nos desayunamos, muchas veces, con un rencor visceral, de gente joven, que no sabemos de donde viene. Un continuo volver a una Guerra Civil, criminal, que muchos, vivieron y que, por nuestro bien, no hay que traer, continuamente, al presente.

Ahora, son diecisiete reinos, tirando de una cuerda, que sostiene, de forma muy débil, un gobierno central, acomplejado, que solo puede, en estos momentos, apagar, fuegos, mientras se quema las manos.

Gobernar a un hijo, ya es difícil, así que hacerlo, con diecisiete díscolos, es tarea que, por lo que, estamos viendo, le viene muy grande al PP.

La Partitocracia, es lo que tiene, que te inflas de poder y piensas, que todo el monte es orégano, que tienes derecho de pernada y que el pueblo, es tonto de libro. Y nos les falta razón, porque, nos han estado, robando, unos y otros, desde el principio y es ahora, cuando la basura, ya se sale de los despachos, cuando hemos, por fin, puesto, el grito en el cielo.

Claro, al socaire de tanta corrupción, han crecido, como hongos, unos partidos, que no dan ninguna confianza, al ciudadano. Uno por flojo, que se arrima, al sol, que más calienta y otro, que amenaza, con darnos, cartillas de racionamiento, a poco, que lo dejemos gobernar.

No todos, son tan afortunados, como yo, que, desde hace casi cuatro años, me voto, a mí misma, salvando, al menos, el honor y la dignidad, pero pienso, en esos millones de españoles, para los que, votar, es un gran dolor de cabeza, que no quita, ninguna aspirina.

¿A quién votar, si cada uno, es peor que el otro? Y no parece, que vayamos a mejorar, al menos, en el corto plazo, porque los que mandan, están cómodos, nadando, en aguas fecales. Aunque, el olor, sea ya, insoportable.

Limpiar al PP y al PSOE de corrupción, cuando ésta, recorre despachos, pasillos y llega, a los tres poderes, es tarea, más que difícil. Como ciudadanos, estamos, pues, desamparados, frente a poderes fácticos, que nos manejan y se burlan de nosotros.

Algo, hay que hacer y pronto. En breve, nos enfrentaremos a nuevas elecciones y la decisión, puede que se mueva, entre votar, con la nariz tapada, votar a partidos nuevos y limpios como AVANT, o no votar.

Ustedes deciden.

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